Alexis Szewczyk se autodefine como “periodista censurado en
TyC Sports”, lugar donde trabajo durante nueve años. A mediados de 2013
emprendió por iniciativa propia la investigación de ciertas cuestiones internas del Club
Tigre, donde el ahora diputado Sergio Massa tenía (y tiene) una importante
ingerencia.
Alexis tuvo la mala suerte de publicar la información
semanas antes de las últimas elecciones, donde el líder del Frente Renovador
era posicionado por el Grupo Clarín como él candidato.
“En la escuela de periodismo no te enseñan qué hacer cuando
el Gerente de Producción del canal donde trabajás te llama a su oficina para
decirte que no hables más de tal cosa. Que la información que das es cierta,
pero que los llamados de alguien muy importante de la empresa dueña del canal
son cada vez más insistentes. Y que lo mejor sería dejar de referirse a
determinadas cuestiones, por ciertas que sean”, indicó Alexis.
El reportero comenzó a ser perseguido a finales de
septiembre de 2013, y en poco tiempo recibió dos advertencias por parte de una
autoridad de TyC Sports. ”El pecado que estaba cometiendo era darle luz a
algunos manejos de la dirigencia del Club Atlético Tigre. No sé si alguna vez
me había sentido tan amenazado por alguien. Tan intimidado. Chiquito. Frágil.
Vulnerable”, confesó Szewczyk.
No obstante el tema no quedó solo en una conversación. “Lo
que siguió no fue menos traumático. Las charlas no se repitieron. De hecho, el
mismo gerente que me advirtió sobre mis dichos se negó a recibirme y a darme
precisiones sobre mi futuro laboral una vez conocida la noticia de que no
continuaría al aire Despertate, el programa en el que trabajé los últimos cinco
años en TyC. Todos los integrantes de la producción fueron notificados y
reubicados. Todos, menos yo. Me hicieron sentir el precio que debía pagar por
haber expuesto determinada información”, relató Alexis.
“¿A quién podía estar afectando con esos dichos? Los invito
a deducir. Corrían los primeros días de octubre. Se acercaban las elecciones
legislativas. El canal es propiedad de Torneos y Competencias y del Grupo
Clarín en partes iguales. El multimedios había elegido a su candidato y no
podía permitirse que alguien revelara cuestiones que pudieran salpicar su
imagen. Quizás por eso, pocos días antes de la primera advertencia por parte de
los gerentes recibí un llamado de Ezequiel Melaranha (vicepresidente de Tigre y
mano derecha de Sergio Massa) para tomar un café y aclarar algunas cosas que
estaba diciendo al aire. Todo cierra”, recuerda Szewczyk.
"Al no haber representatividad gremial en el canal,
algo que se repite en la enorme mayoría de las unidades del Grupo Clarín”
Alexis buscó asesoramiento legal. Luego ante la intimación al Grupo para que
aclararan los episodios de censura la empresa, que se jacta sistemáticamente de
levantar las banderas del periodismo independiente y la libertad de prensa,
decidió despedirlo. No solo eso, sino que ninguno de sus compañeros se
solidarizo con él, y obviamente la noticia no salió en ninguno de los medios
propios o afines.
“Desde el primer momento sentí la necesidad de dar a conocer
lo que me pasó. Nunca me consideré un valiente. No creo serlo. Pero jamás
abandonaría mis convicciones. Y eso es lo que hoy me ayuda a seguir dando
batalla, en busca de trabajo. No voy a callar ante los intereses de quienes dicen
defender la libertad de expresión y son los primeros en silenciar voces. No voy
a ser uno más que alimente la censura y las intimidaciones en nuestra
profesión. De eso estoy seguro. Aunque correrle un poquito la careta al Grupo
Clarín, a Torneos y Competencias y al líder del Frente Renovador pueda traerme
consecuencias en el futuro laboral. El periodismo es libre o es una farsa. Lo
dijo Rodolfo Walsh. Lo comparto y lucho por eso”, concluyó el periodista
despedido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario