Un niño ya se convirtió en una celebridad en el estado indio de Punjab, donde cientos de personas lo visitan cada fin de semana para recibir su bendición debido a que su particular aspecto lo asemeja a una divinidad con aspecto de mono.
Arshid Ali Khan, de 13 años, es considerado la reencarnación
del dios Hanuman debido a que nació con una suerte de rabo de 17 centímetros
ubicado en el final de su columna vertebral. "No me siento ni bien ni mal
por tener cola", expresó el chico.
Ningún médico examinó jamás a Arshid, pero se cree que el
chico podría tener una condición llamada espina bífida, u otra conocida como
meningocele, por lo que no puede caminar y se desplaza en una silla de ruedas,
pero el muchacho ve con buenos ojos su rol divino.
"Este rabo me fue dado por Dios y soy adorado porque
rezo y los deseos de la gente se hacen realidad", explicó el chico. Una
operación podría corregir su defecto y quizás hasta ayudarle a caminar, pero
mientras tanto, lo visitan en su casa todos los domingos y feriados para
adorarlo y hacerle pedidos.
Arshid vive en la casa de su abuelo, Iqbal Qureshi, junto a
dos tíos. El niño perdió a su padre a los cuatro años y su madre volvió a
casarse. "Tenía un año cuando empezó a hablar y decía los nombres de los
dioses de todas las religiones. Ese día entendí que había algo divino en
él", explicó el anciano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario